Situados en el extremo atlántico de Europa, los huertos donde se cultiva la Pera Rocha do Oeste DOP proceden de un único árbol, descubierto por casualidad en una explotación agrícola de la región portuguesa de Sintra, hace más de 150 años.
La piel de la Pera Rocha do Oeste DOP, cuyo color oscila entre el verde y el amarillo, está ligeramente moteada en la parte superior y colorada en el lado del sol. Su pulpa es jugosa, dulce y marcadamente aromática.
Orígenes
En 1836, Pedro António Rocha descubrió una variedad única y desconocida de peral en su explotación de Sintra, una región situada entre Lisboa y el Océano Atlántico.
Al ver que el árbol daba frutos excepcionales, Rocha empezó a invitar a sus amigos y vecinos a visitar su explotación todos los meses de septiembre para que probaran y saborearan las peras. Como Rocha compartió injertos del peral con sus amigos, la variedad se extendió rápidamente por toda la región Oeste y empezó a conocerse como «Pera Rocha» en honor de su descubridor.
Esta variedad única de pera surgió espontáneamente en la explotación de Rocha debido al microclima natural de la zona. Esta región, zarandeada por vientos marítimos y protegida por las montañas de Sintra (históricamente conocidas como Lunae Mons, o las «Montañas de la luna»), está formada por capas de suelos que se remontan a los períodos jurásico y neojurásico. Además de las cualidades favorables del suelo, las peras necesitan de un período de frío invernal para desarrollarse adecuadamente. Después, el sol del verano les confiere una tonalidad rosada.
Casi noventa años después de su descubrimiento, durante el 2.º Congreso Nacional de Pomología celebrado en Alcobaça (Portugal), se otorgó a la pera Rocha el reconocimiento oficial como variedad diferenciada. Durante el congreso, el administrador agrícola Guilherme Joaquim da Matta describió así su visita a la granja de Pedro António Rocha:
«En la Ribeira de Sintra varias personas dijeron que conocían el peral "Rocha" del que se habían extraído los primeros injertos; allí me dirigí y me mostraron el peral al que se referían, situado en una pequeña zanja que separa el huerto de las tierras de labranza. En primer lugar me sorprendió inmediatamente, por ser digna de atención, la solidez del árbol. Me encontraba frente a un ejemplar cuya edad, por su apariencia y por la información facilitada por las personas mayores presentes, no sería inferior a 90 años».
En esa época, las características distintivas de la Pera Rocha do Oeste no solo habían sido reconocidas por la comunidad científica, sino también por los consumidores y los gastrónomos, ya que la pera se convirtió rápidamente en un producto emblemático de la región.
En 2003, la Unión Europea también reconoció las cualidades únicas de la Pera Rocha do Oeste al certificar el producto como denominación de origen protegida (DOP).
Producción
La Pera Rocha do Oeste DOP se produce y se envasa en veintinueve municipios de la región Oeste (así denominada por ser la región más occidental de Portugal).
La experiencia local se aplica escrupulosamente al cultivo de los huertos frutales. Dado que las condiciones climáticas específicas de la región son esenciales para el pleno desarrollo de la pera, la selección, el tratamiento y la recolección de los perales obedecen a ritmos naturales.
La recogida comienza en la segunda quincena de agosto y suele intervenir en ella toda la comunidad. Todos los años, 15.000 trabajadores ayudan a recoger aproximadamente 173.000 toneladas de peras. En algunos huertos, la recolección sigue realizándose de modo tradicional y a mano, agarrando el fruto e inclinándolo ligeramente para evitar dañar el tallo.
Una vez recogidas, las peras se guardan en cajas, formando hileras junto a los árboles. A continuación, las cajas se transportan al almacén, donde las peras se codifican por lotes, se etiquetan y se almacenan en atmósfera refrigerada. Conocida por sus buenas cualidades de conservación, la Pera Rocha do Oeste DOP puede ponerse a la venta y consumirse de agosto a mayo.
Firme y crujiente al principio, la pera se vuelve, al madurar, dulce y suave, con una pulpa más cremosa y jugosa («fundente», en lenguaje técnico). Otra característica distintiva es el russeting con motas de azúcar (zonas salpicadas de color bronce de textura ligeramente rugosa), que puede encontrarse alrededor de la base y del tallo de la pera.
Consumida frecuentemente en ensaladas, licores y zumos de frutas, la dulzura de la Pera Rocha do Oeste DOP hace de ella un ingrediente muy popular en los postres.
Más información
Pera Rocha do Oeste DOP – pliego de condiciones